20 años de sutileza existencial, continúo el camino pateando piedras, arrancando frases de las flores. Enloquecida por el arte en todas sus formas, sigo mis pasos adelantados a mí, destino incrustado en la piel. Eres tú, Rodrigo, quien adorna con girasoles las tierras solitarias que enmarcan el camino. Mi familia son margaritas sonrientes que me cantan bajo circusntancias imposibles. Y es el Amor el que me mueve. Puro Amor... Fuego, combustible, comburente de las fogatas que cada día se encienden en mi corazón.
Y bueno... Así soy yo. Siempre levantándome después de caer. Sí, deseo hacerlo, anhelo hacerlo, y aquí estoy, apoyando mi rodilla sobre el piso, mientras dejo mi mano a un lado y me impulso hacia arriba para adoptar una posición erguida. Es lo que debo hacer. Es lo que me hace bien. Lo sé, estoy en proceso, no es cosa de un segundo a otro, ya que este tipo de "procedimientos" llevan tiempo, pero... voy a hacerlo. ¿Por qué? Porque me lo he propuesto. Ha sido una pregunta recurrente estos días, que he tratado de responder de todas las formas posibles. Es sólo un simple porqué, y la verdad es que, por más que lo he intentado, no he logrado encontrar respuesta. ¿Es que finalmente el fantasma de la nada me alcanzó? Si es eso, entonces lo combatiré con algo. Algo es la respuesta. Sí, suena extremadamente ridículo, pero, sin embargo, siempre lo supe, aunque en muchas ocasiones siento que aún no lo sé. ¿Complicado? Ni siquiera yo me hago sentido ahora. Debo olvidar los detalles terrenales, ocuparme en vez de preocuparme. Ocuparme. Moverme. Caminar. Hablar. Actuar. Ser un humano. Ser. Sólo quiero ser. Siendo... entonces... en ese mismo instante podré sentirme bien conmigo misma. Las energías retornan. Las siento venir muy sutilmente, pero allí están, casi tangibles por instantes. Gracias a todos. Gracias porque ustedes saben que son a quienes debo agradecer. Gracias a ti por ser el amor encarnado en hombre.
Me siento como deben sentirse los papás cuando ven que sus hijos están próximos a dar sus primeros pasos; se ponen frente a ellos, con los brazos extendidos, esperando que el/la pequeño/a avance un poco y luego rcibirlos con un abrazo fuerte y la cara llena de risa por la felicidad que produce el logro. Te veo así, como mi pequeñita (no como una hija, claramente), que quiere avanzar y dejar atrás los temores y las penas.
No solo me siento así, estoy así, esperando que quieras dar ese pequeño gran paso que solo tú debes saber en qué momento dar, para recibirte y abrazarte y protegerte, como me encanta hacer.
"I will always be waiting for you" No lo olvides, como tampoco debes olvidar nunca que te amo con todo mi ser. Eres lo más maravilloso de este mundo, el mejor regao de la vida para mi. Gracias a Dios por ponerte en mi camino, bebé. Te adoro y te amo muchísimo!
1 comentarios:
Me siento como deben sentirse los papás cuando ven que sus hijos están próximos a dar sus primeros pasos; se ponen frente a ellos, con los brazos extendidos, esperando que el/la pequeño/a avance un poco y luego rcibirlos con un abrazo fuerte y la cara llena de risa por la felicidad que produce el logro. Te veo así, como mi pequeñita (no como una hija, claramente), que quiere avanzar y dejar atrás los temores y las penas.
No solo me siento así, estoy así, esperando que quieras dar ese pequeño gran paso que solo tú debes saber en qué momento dar, para recibirte y abrazarte y protegerte, como me encanta hacer.
"I will always be waiting for you" No lo olvides, como tampoco debes olvidar nunca que te amo con todo mi ser. Eres lo más maravilloso de este mundo, el mejor regao de la vida para mi. Gracias a Dios por ponerte en mi camino, bebé. Te adoro y te amo muchísimo!
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